- La decisión busca proteger a la industria nacional, pero amenaza con tensar la relación con Beijing
China indicó que “se opone firmemente a cualquier coerción”, después de que México propusiera un arancel del 50% a las importaciones de automóviles ligeros desde el gigante asiático.
Beijing “se opone firmemente a cualquier coerción de otros para imponer restricciones a China bajo distintos pretextos, lo que socava los derechos e intereses legítimos de China”, dijo un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Lin Jian, en una rueda de prensa diaria.
Lin afirmó que su país siempre ha abogado “por una globalización económica inclusiva y beneficiosa”.
“Esperamos que México nos acompañe en el camino de la promoción de la recuperación económica mundial y el desarrollo del comercio global”, agregó el vocero, al tiempo que reiteró que China “se opone a toda forma de unilateralismo, proteccionismo y medidas discriminatorias y excluyentes”.
El gobierno de México presentó una propuesta para elevar los aranceles a varios países para proteger sectores estratégicos de su industria, con gravámenes de hasta el 50% y los productos chinos en la mira.
La Secretaría de Economía divulgó el miércoles pasado el proyecto de ley presentado al Congreso, que apunta a países con los que México no tiene acuerdos comerciales y que llega en medio de presiones comerciales de Estados Unidos.
Según la propuesta, los autos ligeros tendrían que pagar un arancel de 50%, frente al rango de entre 15% y 20% actual.
China, que según el gobierno es el mayor exportador a México sin acuerdo comercial, se vería fuertemente afectada, en especial el sector automotor, cuyas ventas al país crecieron casi 10% en 2024. Según cifras de la industria, las firmas chinas pasaron de no exportar prácticamente ningún auto hace una década a ocupar el 30% del mercado de autos ligeros el año pasado.
Además del gigante asiático, el proyecto prevé aranceles a productos de Corea del Sur, India, Indonesia, Rusia, Tailandia y Turquía, que tampoco tienen acuerdo comercial con México. Otros sectores impactados serían el textil y la vestimenta, cuyas tasas podrían llegar hasta el 50%, lo que podría afectar a las grandes marcas chinas que venden por la web.
La propuesta ha generado inquietud en distintos sectores productivos nacionales, pues si bien busca incentivar el consumo de vehículos y productos fabricados en México, también podría provocar incrementos de precios para los consumidores finales.
Una alza arancelaria de esta magnitud, si bien protege a la industria local en el corto plazo, también podría tensar las relaciones diplomáticas con los países afectados, abrir la puerta a represalias comerciales y dificultar la inserción de México en cadenas de suministro globales.
Al mismo tiempo, el Gobierno federal ha defendido la iniciativa como parte del “Plan México” para fortalecer la planta productiva nacional y reducir la dependencia de importaciones en sectores clave como el automotriz y el textil.

Más historias
Irán arresta a la Nobel de la Paz Narges Mohammadi
Vuelve a temblar en Japón; ¿hay alerta de tsunami?
León XIV llama a católicos a invitar personas necesitadas a la cena de Navidad